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Comienzo este blog para contar mi experiencia como nueva empleada en la empresa de Cubiertas Diansa. Me llamo Almudena, tengo 26 años y estudié Ingeniería de Edificación. Este es mi primer trabajo y por lo tanto mi entrada en el mundo laboral, como suele pasar a la salida de la universidad en carreras técnicas, sin ningún tipo de conocimiento de lo que me espera.
En mis primeras semanas de trabajo el objetivo era adquirir la mayor cantidad de conocimientos de las tareas que voy a realizar. Mi compañero Javier, con una experiencia en la empresa de 7 años, me guía en todo el recorrido de aprendizaje mediante visitas a obras, realización de trabajo en oficina e información, catálogos y muestras con los que trabaja.
Mi primera impresión al empezar a trabajar es que todo es nuevo, tienes que familiarizarte con las obras, el trato con los trabajadores, realizar pedidos, presupuestos, etc.
Durante dos o tres semanas estuve aprendiendo el funcionamiento de trabajo de la empresa. Las tareas fundamentales son la realización de presupuestos de los estudios que recibimos a lo largo del día. Para ello utilizamos el programa informático Presto, que tuve que aprender a usar ya que no lo había necesitado hasta ahora. Pero lo que conlleva el mayor trabajo es el estudio del proyecto. Nosotros tratamos solo cubiertas y fachadas metálicas por lo tanto estudiamos ese tipo de obras pero con todo el trabajo que en ello repercute. Hay que sacar una medición de lo que se quiere presupuestar, saber que elementos auxiliares tiene como mano de obra necesaria, materiales a utilizar, maquinaria que hay que pedir y remates de los cuales hay que saber donde se van a colocar y que desarrollo van a tener.
En cuanto a las obras, me he dado cuenta que es muy importante el trato con la gente, estar pendiente de todo lo que ocurre a mí alrededor e intentar no meter la pata ya que cualquier despiste puede llevar a un accidente. Otro tema a tener en cuenta es saber cómo funcionan las empresas que suministran materiales, maquinaria y medios auxiliares, es fundamental organizar la ejecución de la obra con la llegada de todo lo que se va a necesitar.
Una vez superado el periodo de adaptación sigue el aprendizaje, cada visita a obra es diferente, cada proyecto tiene sus particularidades y las dificultades que surgen se solucionan aplicando métodos estudiados según nuestros criterios.
En definitiva, este primer mes ha sido una experiencia increíble, me he dado cuenta que trabajando con compañeros que te ayudan, haciendo cosas que te gustan e intentando mejorar día a día en todo lo que haces, el tiempo pasa volando y los madrugones valen la pena.
Almudena Hernández.
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